Fondo abstracto y titulo sobreimpreso; LOS MAYORES EN LA DECLARACIÓN DE LOS DERECHOS DIGITALES DE LA UE

Los mayores en la declaración de los derechos digitales de la UE

Los mayores en la declaración de los derechos digitales de la UE son mencionados para manifestar que no serán abandonados.

No hay una mención muy extensa al problema de la brecha digital generacional, pero manifiestan rotundamente que trabajarán para que la transformación digital “no deje a nadie atrás y que debería incluir, en particular, a las personas mayores, a las personas con discapacidad o a las personas marginalizadas, vulnerables o privadas de derechos”.

Sin entrar en más profundidades, al menos la declaración nos menciona expresamente y  proclama su voluntad de no dejarnos atrás.

 Los derechos digitales de todos, y de los mayores, son preocupación de las autoridades y su declaración es una buena noticia.

1. Declaración europea sobre los derechos y los principios digitales

Europa, con un pensamiento milenario a sus espaldas, está tratando de situar a la tecnología al lado del hombre, de ponerla a su servicio. Desde los clásicos griegos a los filósofos más contemporáneos, Ortega y Gasset, Heidegger, se está reflexionando sobre la vinculación entre la técnica y el hombre.  

La UE va por delante de otros estados en la preocupación por salvaguardar los derechos de las personas en la sociedad digital.

Estados Unidos, por ejemplo, no está en una exacta sintonía con la UE, pues tienen una visión de la privacidad diferente. No hablemos de China, que, carente de libertades, usa la tecnología para vigilar y modelar a la ciudadanía. Otros ya, incapaces de entrar en los nuevos tiempos, recurren a las invasiones como forma de establecer su hegemonía.

Europa desea liderar, y así lo manifiesta, una transformación digital centrada en las personas. Desea que se extienda esta idea por todo el mundo, defendiéndola ante las Naciones Unidas y diversos organismos internacionales. Va a proponer un Consejo de Comercio y Tecnología entre la UE y EE. UU.  

Las tecnologías digitales deben proteger los derechos de las personas, sustentar la democracia y garantizar que todos los actores del sector digital actúen con responsabilidad y seguridad. Son los valores promovidos por la UE para su organización y para todo el mundo.

La Declaración Europea sobre los Derechos y Principios Digitales para la Década Digital, es un paso en pro de una tecnología dirigida hacia el hombre.

1.1 Antecedentes

No es la primera vez que la CE aborda los derechos de los ciudadanos en relación con la tecnología. Hay tres significativas declaraciones anteriores.

Una es la Declaración de Berlín Sobre la sociedad digital y la administración digital basada en valores, de diciembre del 2020.  

La Década Digital de Europa: la Comisión fija el rumbo hacia una Europa empoderada digitalmente de aquí a 2030. (marzo 2021). En este documento se proponen objetivos concretos para el 2030.

Otra es la Declaración de Lisboa Democracia Digital con un Propósito, de junio del 2021.

Todas estas son preliminares de La Declaración de enero de 2022.  

1.2 La declaración

La Comisión Europea ha propuesto al Parlamento Europeo la firma de la  Declaración Europea sobre los Derechos y Principios Digitales para la Década Digital.(enero 2022)

Hay también una Comunicación de la comisión al parlamento europeo, al consejo, al comité económico y social europeo y al comité de las regiones.(enero 2022)

Como percibirán, declaraciones no faltan. Parece que hay un creciente interés y se va avanzando, aún en el terreno de las proclamaciones, pero algo es algo, por aquí se puede empezar y a nuestro entender no es poco.

Simbolo sobre EL DERECHO DE LA UE
Simbolo sobre EL DERECHO DE LA UE

2. Los derechos y los principios digitales

Salvaguardar los derechos, la libertad y los principios en la sociedad digital es una meta de la UE. Poner a las personas en el medio es el eje central, no dejarlas atrás, incluir a todos. A los mayores se les menciona, como comentábamos.

Empoderar a los ciudadanos con una capacitación digital para que se desenvuelvan con criterio por la sociedad actual, es uno de sus principales objetivos. Para el 2030, al menos el 80 % de todos los adultos debería tener competencias digitales básicas, y debería haber veinte millones de especialistas en TIC en la UE, con más mujeres adoptando este tipo de trabajo.

La UE se emplaza para el 2030 a conseguir la máxima conectividad. Todos los hogares de la UE deberán tener conectividad de gigabit y todas las zonas pobladas deberán estar servidas por redes 5G. La producción de semiconductores de punta y sostenibles en Europa debería representar el 20 % de la producción mundial. Deberan desplegarse en la UE diez mil nodos externos muy seguros y climáticamente neutros; y Europa debería tener su primer ordenador cuántico.

Los servicios públicos deben estar digitalizados, en los cuales el ciudadano de forma fácil y segura pueda realizar todos los trámites, pues la identidad digital debe extenderse cuanto antes a toda la población. Para 2030, todos los servicios públicos clave deberían estar disponibles en línea, todos los ciudadanos deberían tener acceso a su historial médico electrónico y el 80 % de los ciudadanos deberían utilizar una solución de identificación electrónica.

Otra ambición es que la inteligencia artificial sea una de las palancas del desarrollo económico y social, en favor de unos ciudadanos propietarios de sus datos, y donde las personas sean dueñas de sus propias decisiones y no estén determinadas por los algoritmos.  

La tecnología puede ser la herramienta para conseguir una democracia más profunda y participativa. La conectividad instantánea nos posibilitará dar la opinión en muchos asuntos, hoy solo gestionados por los representantes.

La protección de datos y la seguridad son otros de los objetivos.

Os damos paso un folleto muy breve y bien explicado sobre los derechos y los principios de UE.

3. Las iniciativas del Gobierno de España

España, consciente de la transcendencia digital de la sociedad, se suma al movimiento liderado de la UE. En julio del 2021  publica una Carta de Derechos Digitales.Os adjuntamos un enlace a un artículo del Portal de la Administración Electrónica.  

Es una carta sin ninguna intención legislativa. Tiene en cuenta otras leyes relacionadas con la sociedad de la información y los derechos de los ciudadanos, pero su función es la de alumbrar el futuro, no la de promulgar normas.  

Pretende ser un marco de referencia “para garantizar los derechos de la ciudadanía en la nueva realidad digital y tiene como objetivo reconocer los retos que plantea la adaptación de los derechos actuales al entorno virtual y digital”.

Aspira a propiciar una transformación digital humanista de la sociedad española y a adaptar el derecho a la realidad digital.

En nuestro país hay otras muchas leyes relacionadas con la accesibilidad y la protección de la privacidad de los ciudadanos. En nuestro post Las tecnologías, accesibles para todos, hablamos de ellas.

Imagen del Parlamento Europeo
Imagen del Parlamento Europeo

4. El conocimiento y la diligencia son la clave

Los lectores de este blog habrán percibido cómo no damos excesivo crédito a las iniciativas legislativas. No porque no creamos en las leyes, o que estas no se han de cumplir, más bien estimamos que, para abordar una transformación humanista digital, es preferible apoyarse en otros pilares.

Una sociedad digital, cuya transformación evoluciona velozmente, difícilmente pueda ser encorsetada con la legislación. Estamos un terreno difícil de moldear con las leyes.

En cambio, ciudadanos con capacitación técnica y con una sólida formación ética y principios humanistas, sí pueden conseguir una sociedad digital enfocada a la mujer y al hombre. El conocimiento, la cultura digital y humanística, nos harán ciudadanos con criterio, cuyas determinaciones moverán a nuestra sociedad hacia un estadio mejor.

Igualmente, estos ciudadanos bien preparados, sin nadie atrás, podrán profundizar en la democracia, aprovechando la capacidad prestada por comunicaciones actuales.

Con respecto a las grandes compañías, unos ciudadanos cultos seguro se harán respetar, pues en cualquier momento, si estas no consideran sus intereses, les darán la espalda sin pestañear.

Con respecto a la UE, debemos exigirles que den ejemplo con sus actuaciones. Que los procedimientos y trámites administrativos sean digitales y accesibles para todos los ciudadanos. Que la información este disponible para todos, y no sea utilizada la inteligencia artificial para conformar  la sociedad.

La declaración europea puede ser una guía para inspirar a estados, organizaciones, empresas y ciudadanos. Indudablemente la UE tendrá que legislar y hacer cumplir las leyes, pero su gran misión es la de conseguir una sociedad preparada, consciente y activa, y una libertad para que las personas tomen sus propias decisiones y las empresas puedan competir en las condiciones lo más justas posibles.   

5. Los mayores en la declaración de los derechos digitales de la UE

La Declaración de la UE es general, ningún sector o grupo poblacional son aludidas, excepto los mayores, las personas con discapacidades, marginalizadas, vulnerables o privadas de derechos, que  son mencionadas en un pequeño párrafo arriba transcrito.

A los mayores se nos vuelve a agrupar con personas con problemas a los que hay que socorrer, y esto no es así. Los mayores ahora tienen el problema de ser una generación a la que la informática le llego en sus últimos años, pero según pase el tiempo, llegarán a esta edad siendo digitales.  

Solo en la última etapa, por una disminución de las capacidades, necesitaremos productos pensados para esta fase.

En cualquier caso, consideramos la declaración como muy positiva, es un ideario a nuestro juicio a seguir y a apoyar,  no en todas las partes de este mundo comulgan con esta convicción.

También depende de nosotros. Ya hablábamos de este tema en nuestro último artículo El peligro de la tecnología sin la ética al lado.En él, comentábamos el peligro de la tecnología, si, entre otras cosas, no hacemos algo al respecto.

La Declaración aboga por el empoderamiento del ciudadano ante la sociedad digital y este es un principio muy loable.  

En muchas ocasiones criticamos a la UE. La catalogamos como poco eficaz, habida en manifestaciones, y poco resuelta en el terreno de la gestión.

En este caso la declaración es un paso importante, marca un rumbo a seguir por parte de las organizaciones, empresas y estados.

Y sobre todo por nosotros, debemos instruirnos para formar parte de esos millones de ciudadanos capacitados digitalmente y con la ética a su lado. Es la mejor forma de conseguir una sociedad digital humana y con derechos.

Revisión de texto: Ana Llorca

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