Animémonos a ser competentes digitales

Animémonos a ser competentes digitales.

Animémonos a sumarnos a esta inercia social propulsada por la tecnología. Pues de no hacerlo quedaremos marginados. Ya tratamos este tema en nuestro artículo Hacerse competente digital cuando se es mayor.

Como sabéis, en julio de 2023 fundamos la asociación SeniorTic Mayores con Tecnología, con la finalidad de contribuir a conseguir una mejor vida a los mayores, procurando una mejor conjunción entre la longevidad y la tecnología. Deseamos que la tecnología sea un viento a nuestro favor y no un impedimento para el transcurso de nuestra vida diaria.

1. SeniorTic anima a los seniors

Una de nuestras actividades es animar a los mayores a hacerse competentes digitales para beneficiarse y convertirse en actores en este transcurrir veloz de nuestra sociedad. 

Realizamos encuentros, reuniones, conferencias y eventos. Acudimos, cuando nos llaman, a apoyar alguna iniciativa encaminada a la capacitación digital de los seniors.

Uno de nuestros fines es decir a los seniors: que la tecnología no es cuestión de edad.

2. Hemos tenido una gran suerte

Hemos tenido una gran suerte, vivimos muchos años y este favor ha coincidido con la transformación digital de nuestro mundo que, lejos de ser un hándicap, ha sido una enorme fortuna. 

Las TIC no solo nos han servido para obtener facilidades y felicidades. Nos van a servir para mejorarnos la salud, la asistencia, la autonomía y estar un mayor número de días en nuestro hogar. La tecnología nos beneficia y debemos exigirla.

En España el 94,3 % de los hogares españoles tienen a su disposición una red. De estos, el 83,6 % dispone de una red a 100 Mbps de velocidad, o superiores. La red en el móvil la tiene prácticamente el 100% de la población.

3. Muchos nos hemos alejado de las TIC

Muchos de nosotros nos hemos formado, informado y hemos trabajado en un mundo no digital, con herramientas diferentes, con otras formas de hacer las cosas. Hemos bebido de otras fuentes de conocimientos.

Nuestras destrezas intelectuales se han conformado en relación con los tiempos que nos tocó vivir.  Nuestras capacidades, en una buena medida, están en sintonía con cómo tratábamos la información, la formación, la comunicación…

La transformación digital ha cambiado la realidad. La inmediatez de las acciones, la velocidad y la universalidad de las conexiones, ha hecho un mundo distinto por el que estamos obligados a desplazarnos de otra manera. Vivimos en un mundo que recompensa otras habilidades.

Sin duda, a muchos de nosotros, especialmente a los más alejados de las TIC, por razones de edad o por el tipo de trabajo, las tecnologías nos han desplazado, nos han alejado de este tiempo, de las nuevas relaciones sociales.

Una gran parte de los mayores se han quedado a medio camino, no se sienten cómodos con las TIC, las utilizan cuando no tienen otro remedio y las evitan siempre que pueden.

4. Siempre estamos aprendiendo y es posible

Hoy vivimos muchos años, la ancianidad se retrasa, somos activos, viajeros, inquietos y curiosos durante casi toda nuestra existencia. Seguimos aprendiendo por placer y por necesidad.

Estas ventajas se han ampliado al coincidir la longevidad con la tecnología. La tecnología, aunque nos ha pillado a algunos a traspiés, es una gran ventaja para los seniors.

Nuestro cerebro sigue reconformándose y adaptándose. La plasticidad neuronal le permite sortear los deterioros originados por la edad si, claro está, no hay enfermedad. Las neuronas siguen fabricándose durante casi toda nuestra existencia. Facilitamos el artículo Aspectos neurológicos del envejecimiento.

Esa plasticidad igualmente conforma nuestro cerebro para aprender: otras formas de funcionamiento, de procesamiento de la información. Nos abre nuevas destrezas aptas para movernos por la sociedad digital.

Las competencias digitales no solo nos ayudan a obtener facilidades y felicidades, también mejoran nuestra salud mental, nos mantienen en buena forma desde el punto de vista cognitivo.

Poner las TIC a nuestro lado es una tarea imprescindible para todos los mayores, para aprovechar sus grandes ventajas.

5. Todo a nuestro favor

Tenemos todo a nuestro favor. A excepción de algunos inconvenientes, todo parece favorecer la capacitación digital. De todos, y de los seniors también.

Es inexcusable afrontarla, cuando estamos plenamente activos, a esa edad que ronda entre los 60 y 70 años, y somos dueños de nuestro tiempo.

El cerebro nos va a ayudar, va a adaptarse, nos va a facilitar las habilidades necesarias. Se trata de activarlo, de estimularlo, de entrenarlo.   

Encontramos gratis la formación en la red, en instituciones, asociaciones y plataformas. Tenemos familiares, amigos que seguro nos pueden ayudar. Un ejemplo de plataforma gratuita es Conquista la era digital: Guía para Mayores Digitales.

La informática es cada día más usable y accesible, evoluciona con rapidez hacia soluciones asequibles para todos.

En la presente etapa, las TIC han incorporado el lenguaje natural, haciendo factible el diálogo con estas. Hoy podemos hablar con las máquinas.

Tenemos uno de los países más conectados de Europa, y Andalucía no se queda atrás. Todos tenemos internet en nuestras casas.

6. Animémonos a ser competentes digitales

Animémonos a ser competentes digitales.

La edad no es un inconveniente, sobre todo si gozamos de una buena salud. La cultura es imprescindible para movernos por la vida con felicidad, soltura y libertad, y hoy ser culto es ser competente digital.

Muchos ya somos digitales o medio digitales, sigamos adelante. Otros empezaran casi desde cero; el reto será grande y las satisfacciones aún mayores.

La gratuidad y otros vientos a nuestro favor, arriba comentados, no servirán de nada si no tenemos una voluntad firme de querer ser digitales y de ponernos manos a la obra.

Nuestras generaciones han superado muchas dificultades, esta es otra de las sencillas, de las superables fácilmente.

Poco a poco, con paciencia, y perseverancia veremos cómo cada vez más rápido nos vamos sumergiendo en el mundo digital.

Asociémonos con otros como nosotros, no muchos, y entre unos y otros y las ayudas exteriores, podremos ir avanzando.

Empecemos por lo más necesario, por lo que más nos gusta, aquello que nos atraiga y mantenga nuestra atención, con ánimo y sabiendo que los errores son nuestra fuente de conocimiento.

Sin miedo al ridículo, pues nos aprecian por lo que hacemos, por lo que progresamos, porque nos adaptamos a los nuevos tiempos como todos los demás.

Pero, como mantenemos, de nosotros depende, no debemos conformarnos con quedarnos en la cuneta de la carretera, a expensas de que alguien nos venga a recoger.

Animémonos a ser competentes digitales.